El Desarrollo Low Code / No Code está transformando la forma en que las organizaciones abordan la Automatización Inteligente y la creación de soluciones digitales.
Para profundizar en este tema, conversamos con Eugenio Punti, arquitecto en ENTA Consulting, quien cuenta con amplia experiencia liderando proyectos de Automatización Inteligente y ayudando a empresas de múltiples industrias a implementar plataformas líderes como UiPath, SS&C Blue Prism, Automation Anywhere y Microsoft Power Automate.
Su recorrido profesional lo ha posicionado como referente técnico en arquitectura de soluciones RPA, gobierno de automatización y adopción de plataformas Low Code, aportando una mirada integral sobre las oportunidades y riesgos que enfrentan las organizaciones al incorporar estas herramientas.
En esta oportunidad, conversamos sobre las ventajas, desafíos y buenas prácticas que acompañan esta tendencia “Low Code / No Code”.
¿Qué entendemos por plataformas Low Code / No Code?
El término Low Code se refiere a plataformas de desarrollo que permiten construir aplicaciones y automatizaciones mediante interfaces visuales, arrastrando y soltando componentes (cajas, flujos, conectores) en lugar de escribir todo el código desde cero. Detrás de cada paso existe código preconfigurado que resuelve una funcionalidad específica: conectarse a una base de datos, enviar un correo, procesar un archivo, etc.
			Esto significa que un usuario con conocimientos limitados de programación puede diseñar un proceso completo, simplemente ordenando los pasos lógicos como si fueran piezas de un rompecabezas.
Esto habilita a usuarios con poca experiencia en programación a diseñar algoritmos y procesos de manera sencilla.
“El fuerte de estas herramientas es que una persona que no es experta en desarrollo puede, con capacitación, resolver sus propias necesidades sin los típicos problemas del código tradicional”, explica Eugenio.
En cambio, el No Code lleva este concepto un paso más allá: cero código. Todo el desarrollo se realiza de manera visual, con interfaces que no requieren extender la lógica mediante programación (100% visual, sin necesidad de escribir ni una línea de código).
Aunque la diferencia entre ambos modelos es cada vez más difusa, ambos apuntan a la democratización del desarrollo: que no solo el área de TI pueda construir soluciones digitales.
Eugenio destacó varios escenarios típicos donde estas herramientas marcan la diferencia:
- Automatizaciones rápidas en áreas de negocio
 
“Un colaborador de cualquier área por ejemplo Finanzas, puede construir un flujo sencillo que lo ayude en su día a día”.
Por ejemplo, construir un flujo de aprobaciones simples. Un colaborador manda una solicitud, el jefe del área es la persona designada para aprobarlo, y luego el flujo de aprobaciones continua con la revisión y aprobación final de recursos humanos.
- Procesos sencillos y personales
 
Recibir un archivo adjunto por mail y cargarlo de forma automática en un repositorio compartido.
“Si lo único que querés hacer es que todos los días, cuando te llega un mail con un adjunto, ese adjunto se guarde en SharePoint. Esto se puede hacer y eso no genera un impacto grande en la compañía”.
- Procesos críticos donde TI debe intervenir
 
En cambio, si alguien quisiera automatizar el cierre contable mensual con un flujo creado sin experiencia técnica, ese desarrollo no sería recomendable.
“Esos procesos se recomienda se asignen a una célula de desarrollo, ya sea interna o de una consultora”.
El equilibrio: autonomía con límites
Estos ejemplos muestran el verdadero valor del Low Code: dar autonomía a usuarios no técnicos para resolver tareas simples e inmediatas, pero siempre con un esquema de gobernanza que establezca qué procesos son aptos para un Citizen Developer y cuáles deben escalar a un equipo de TI.
Low Code | Ventajas: agilidad y autonomía
De acuerdo con el informe de Forrester – “The State of Low-Code, Global 2024”, el uso de plataformas Low Code se ha expandido a nivel global, con más de 2.000 desarrolladores encuestados que destacan la rapidez y accesibilidad de estas herramientas para resolver necesidades de negocio, tanto en manos de profesionales como de Citizen Developers (Forrester).
“Un beneficio claro de Low Code es el ahorro en tiempos de desarrollo. Con código tradicional tendrías que armar absolutamente todo, mientras que estas plataformas ya traen incorporadas capacidades de monitoreo, seguridad y escalabilidad”, comenta Eugenio
Low Code | Desafíos: escalabilidad y confiabilidad
El entusiasmo por estas herramientas también implica riesgos. Entre los principales:
- Duplicación de soluciones en distintas áreas.
 - Pérdida de conocimiento si no hay un registro centralizado.
 - Problemas de escalabilidad, cuando un flujo creado por un usuario no técnico se pretende aplicar a toda la organización.
 - Confiabilidad de los datos, al no siempre contar con controles adecuados.
 
			Buenas prácticas: Gobernanza y el rol de los “Champions Digitales”
La clave para que Low Code aporte valor sostenible está en la gobernanza.
Las empresas más avanzadas establecen comités de arquitectura o de TI, responsables de aprobar desarrollos, evaluar riesgos y administrar bibliotecas de soluciones reutilizables.
“Lo recomendable es contar con una biblioteca centralizada de flujos ya validados, para evitar duplicaciones y asegurar calidad”, explica Eugenio.
En este esquema cobran relevancia figuras como los Champions Digitales, que actúan como “routers”: reciben requerimientos, filtran cuáles puede resolver un Citizen Developer y cuáles deben escalarse a un equipo de desarrollo profesional.
El rol de los Citizen Developers
Aunque este tema merece un desarrollo aparte (y lo tendrá en próximas notas), Eugenio lo introduce como una tendencia clave:
“Cualquier persona con capacidad analítica y entendimiento de procesos puede ser un Citizen Developer. No hace falta que sepan programar; lo importante es que puedan pensar en pasos lógicos con principio y fin”.
Las organizaciones ya exploran programas de capacitación internos para que empleados de distintas áreas se conviertan en desarrolladores ciudadanos, con el respaldo de IT y la consultoría especializada.
Mirada hacia adelante: IA y Low Code
El futuro del Low Code está íntimamente ligado a la Inteligencia Artificial. Herramientas como Power Platform ya integran Copilot, que asiste en la creación de flujos.
“Estos avances van a permitir que personas sin experiencia técnica, puedan crear soluciones complejas de manera entendible y segura”, proyecta Eugenio.
Claramente, el auge del Low Code / No Code plantea una oportunidad inigualable para acelerar la innovación dentro de las organizaciones, pero su éxito depende de contar con un marco de gobernanza sólido, “Champions Digitales” capacitados y el acompañamiento de consultoras expertas.
“Desde ENTA trabajamos con todas las plataformas Low Code líderes del mercado (presentes en el Cuadrante de Gartner 2025), impulsamos la figura de comités y Champions Digitales, y brindamos soporte a las empresas para que estas iniciativas escalen de manera segura”.